Salut implementará la medida de manera escalonada: el año que viene ya empezará a cribar a las mujeres de entre 49 y 70 años.

Una técnica especialista en radiodiagnóstico realiza una mamografía a una mujer que participa en el programa de detección precoz del cáncer de mama en el ICO / FERRAN NADEU

FONT: El Periódico de Catalunya https://www.elperiodico.com/es/sanidad/20240517/cataluna-avanzara-45-anos-mamografias-cancer-mama-102192334

Catalunya avanzará la edad de las mamografías de detección precoz del cáncer de mama a los 45 años y también las alargará a los 74. Actualmente, las mamografías de control se realizan cada dos años entre los 50 y los 69. Esta ampliación del espectro de edad para estos cribados se hará de forma escalonada en toda Catalunya a partir de 2025. Es decir, no se hará de golpe. Así, el año que viene se cribará a las mujeres de entre 49 y 70 años; en 2026, a las de entre 48 y 71 años, y así sucesivamente hasta 2029, año en que en Catalunya estarán totalmente implementadas las mamografías de control para todas las mujeres de entre 45 y 74 años. EEUU recomienda bajar las mamografías a los 40 años debido al aumento del cáncer de mama en mujeres más jóvenes. En Europa, todos los países e incluso la Comisión Europea recomiendan no hacerlas por debajo de los 45 porque en esas edades pierden efectividad.

“En estos momentos estamos valorando el impacto que tendrá esta medida, ya que el volumen de mujeres que se incorporan a estos cribados implica un aumento importante de la actividad”, explica a este diario Josep Alfons Espinàs, coordinador de la Oficina de Cribratge de Càncer del Pla Director d’Oncologia del Departament de Salut. Según Espinàs, la conselleria está alineada con las recomendaciones de la Comisión Europea, que apuestan por ampliar las mamografías al espectro de edad de entre 45 y 74 años.

“Estamos de acuerdo con que reduciremos la mortalidad y ganaremos vida. Pero esta decisión implica hacer actividad extra. Antes del verano presentaremos al Servei Català de la Salut (CatSalut) nuestra valoración. Se han de poner los recursos para, el año que viene, asumir esta parte extra de gastos”, señala Espinàs. También el Ministerio de Sanidad está valorando incorporar la ampliación de las mamografías a la cartera de servicios. De hacerlo, esto pasaría a ser obligatorio en todo el sistema de salud. “Pero es algo que debería ir ligado a recursos”avisa este experto.

En Catalunya, la directriz del Pla Director d’Oncologia es aumentar la edad de estos cribados poco a poco. “Empezaríamos gradualmente y en cinco años conseguiríamos la cobertura total. Estas cosas siempre son progresivas, no pueden hacerse de golpe. El próximo año podemos empezar”, asegura Espinàs. Según los cálculos del Pla Director d’Oncologia, cada año añadido a estos cribados implicará un 10% más de actividad. Es decir, el próximo 2025, hacer cribados de los 49 a los 70 años supondrá un 10% más de actividad. En total, cuando se adquiera la cobertura que se persigue, de los 45 a los 74 años, la actividad hospitalaria habrá aumentado un 50%, “un cambio sustancial”, por lo que debe hacerse de forma escalonada, justifica Espinàs.

La franja de edad de los 50 a los 69, que es la que se criba en estos momentos, aglutina el 47% de todos los cánceres de mama. La de los 70 a los 74 años, un 7%. Y la de los 45 a los 49 años, pese a que tiene un “riesgo más bajo”, representa el 10% de todos los cánceres de mama. “Las poblaciones que incorporamos representan el 17% del cáncer de mama en toda Catalunya”, precisa.

Aumento en jóvenes

Según Espinàs, la idea de rebajar la edad de cribado del cáncer de mama responde a que existe una “cierta tendencia al incremento” de esta patología en las mujeres más jóvenes. Ocurre en todo el mundo y está relacionado, creen los expertos, con la obesidad, el consumo de alcohol, los embarazos tardíos o el hecho de no tener hijos, entre otros factores. “Este aumento se ha detectado en EEUU. Nosotros no hemos hecho un análisis exhaustivo en Catalunya y no tenemos la impresión de que pase tanto aquí como allí. Seguramente pasa un poco, pero no tanto”, cuenta Espinàs.

En EEUU, las tasas de cáncer de mama en mujeres de 40 años aumentan un 2% cada año, según un estudio presentado recientemente en ‘Journal of the American Medical Association’. “Aquí las recomendaciones de la Comisión Europea y las guías apuntan a bajar las mamografías a los 45 años, pero no a los 40. Incluso sugieren que de 40 a 45 no deben hacerse estas pruebas de control”, dice Espinàs.

Cribados personalizados

Como precisa Sonia Pernas, coordinadora de la Unidad de Cáncer de Mama del Institut Català d’Oncologia (ICO), aunque la mamografía es, hasta ahora, la “mejor prueba” de cribado, “no es perfecta”. Por otro lado, explica que cribar a mujeres de menos de 45 años es “discutible” porque la mama es “muy densa y aquí la mamografía no ha demostrado ser tan eficaz”. Además, en mujeres de menos de 40 años, el cáncer de mama no es tan frecuente. También señala que en EEUU no hay campañas de cribado públicas como en Catalunya y España, sino que todo se basa en “recomendaciones”, al no haber allí hay una sanidad universal. 

Pernas cree que ampliar los cribados de cáncer de mama a la franja de 45-74 años, pese a los recursos que haya que destinar a ello, supondrá una “inversión que merece la pena evaluar”. Además, la situación también abre la puerta a “cribados más individualizados”. Esto es, aquellos que persiguen determinar las causas genéticas. “Hemos de ir hacia cribados personalizados dependiendo de los antecedentes de la mujer y los factores de riesgo, y no solo dependiendo de la edad”, reivindica esta oncóloga.